Resumen
Formado en España en la estela del mundo institucionista español (Francisco Giner de los Ríos, Bernaldo de Quirós, Rafael Salillas, Manuel Sales y Ferré y Pedro Dorado Montero), la personalidad intelectual de Fernando Ortiz marca de forma notable el mundo cultural cubano, desde sus primeras posiciones de lombrosiano convencido, pasando por una interesante etapa de regeneracionista, hasta convertirse en su madurez en el oráculo de la intelectualidad de Cuba. El estudio de la sociedad, así como el rastreo en la historia como medio de explicar la formación del pueblo y de la nación cubanas fue el objetivo primordial de Fernando Ortiz; un pensador y político comprometido con su país, que con una preocupación y un ideario nacionalista trató, a través de la educación y de la regeneración, de lograr la integridad de los diversos componentes étnicos y culturales de la sociedad cubana, imprescindible para alcanzar la soberanía nacional.