Is anthropogenic climate change evil? : Applying the atrocity paradigm to climate change

Resumen

¿Por qué distinguir entre males y meros daños? Los males requieren una acción más inmediata y profunda que otros daños. Los males deben ser contrarrestados y abordados de frente; no pueden ser simplemente reconocidos sin esfuerzos deliberados para detenerlos. En este artículo sostengo que el cambio climático provocado por el hombre es uno de esos males. Para argumentar esto, empleo la teoría del mal de Claudia Card, denominada Paradigma de la Atrocidad, que define el mal como “un daño intolerable y razonablemente previsible, producido por una mala acción inexcusable”. Este artículo examina cada uno de los tres elementos del Paradigma de la Atrocidad en relación con el cambio climático y demuestra que cumple cada una de las tres medidas. Como resultado, concluyo que el cambio climático provocado por el ser humano es realmente un mal y no un mero daño, lo que sugiere la necesidad imperiosa de impedir con prontitud que continúe. A los efectos de este artículo, el debate sobre los efectos adversos del cambio climático de origen humano se limita a la evaluación de la subida del nivel del mar y la mayor frecuencia, imprevisibilidad y gravedad de las tormentas en las zonas costeras e insulares. El cambio climático antropogénico, por tanto, se trata y posteriormente se juzga como un mal moral. Al ser provocado por el hombre, los efectos del cambio climático estudiados en este documento no se consideran males naturales y deben evitarse mediante la (re)acción humana.