Título en español.

Resumen

Los fumigantes gaseosos del suelo, bromuro de metilo y aerosol cloropicrino, ofrecen las siguientes ventajas en su aplicación a los semilleros de tabaco: 1. Son más eficaces para el control del sancocho que los demás fungicidas que se han venido recomendando hasta ahora en Puerto Rico. 2. Sus propiedades, en cuanto a eliminar los yerbajos, hacen innecesarios los continuos desyerbos a mano que a la vez que son costosos, ocupan mucho tiempo al agricultor. 3. Se necesita una sola aplicación de cualquiera de estos fumigantes, la cual se hace antes de regar la semilla de tabaco. Esto evita tener que esperar el tiempo preciso y adecuado que hasta ahora se requería para aplicar los fungicidas al semillero. Durante el estudio se observó que el porcentaje de emergencia de las plantitas fué mayor donde se aplicaron estos fumigantes. Este hecho parece deberse a que el sancocho pudo eliminarse antes de la emergencia de las plantitas y a que, no habiendo necesidad de erradicar yerbajos se prescindió de la pérdida normal de plantitas arrancadas mientras se verifican los desyerbos a mano. Si bien es verdad que la fumigación del semillero de tabaco por medio de estos fumigantes gaseosos resulta más costosa, pues hay que comprar el equipo adecuado para tal propósito, también deben tomarse en cuenta su eficacia para controlar el sancocho, la eliminación de los desyerbos a mano y el mayor porcentaje de plantitas que puede lograrse. Mirados ambos aspectos se podría concluir que hay la posibilidad de que este método de fumigación pueda ser factible y económico como una nueva práctica.