Título en español.

Resumen

En la Subestación Experimental Agrícola de Fortuna se notó que durante los meses de diciembre de 1965 y enero de 1966 murió un buen número de arbolitos de mango injertados y ubicados en un umbráculo. La enfermedad también apareció en el huerto de esa Subestación, atacando algunas de las variedades exóticas de mango. La variedad Jacqueline fue la más afectada, observándose que en el tronco y en las ramas aparecían unas llagas, que también causaban una muerte retrogresiva en las extremidades de las ramas jóvenes. Al estudiarse el material enfermo se aisló un hongo del género Diplodia. Ensayos posteriores de patogenicidad revelaron que este organismo era el agente causal de la enfermedad. El estado perfecto, Physalospora rhodina, se pudo lograr al inocularse tallos tiernos y pecíolos de papaya (Carica papaya L.) y también frutas de caimito (Chrysophyllum cainito L.) con picnoconidios del hongo. La enfermedad fue combatida en el umbráculo con bastante éxito al seleccionarse yemas de árboles sanos, al esterilizar frecuentemente las cuchillas de injertar con alcohol, al mantener los arbolitos de mangos injertados en un lugar ventilado y menos húmedo, y al no transferir los del umbráculo al campo raso, hasta tanto no hubiesen cicatrizado los tejidos del injerto. La enfermedad se combatió en el huerto asperjando los árboles enfermos semanalmente con oxicloruro de cobre sulfatado (3 lbs./100 gal.) y pintando los troncos y ramas principales de los árboles con una pasta preparada con el compuesto de cobre ya indicado.